La idea de sortear una vivienda no es nueva, muchos lo han intentado antes pero siempre con fracaso por la negativa del Ministerio de Hacienda de dar su brazo a torcer. En el sector inmobiliario, particulares y empresas, han intentado sin éxito dar salida a sus inmuebles con esta fórmula. Pero recientemente, nos encontramos con el caso de la familia Bolumar, que sí han conseguido la aprobación para poder tirar adelante la rifa.

La condición indispensable para que se conceda el sorteo, es la obtención del visto bueno por parte de la Dirección General del Juego, lo que requiere una serie de pasos obligatorios tales como tasación del inmueble, pago de impuestos o la presentación de la documentación que justifica la propiedad del premio. 

Entonces, ¿por qué se permiten unas, otras se deniegan e incluso algunas se sancionan? Según el Ministerio de Hacienda la práctica de sorteos inmobiliarios a nivel de particulares está prohibido. Pero si se realiza de forma "ocasional" y se cumplen los requisitos de control, se puede hacer.

El concepto de rifa es el siguiente: adjudicación de uno o varios premios mediante la celebración de un sorteo por azar. Para que dicha rifa tenga carácter "ocasional" (como pide el Ministerio), no se puede realizar de forma permanente o si existiese periodicidad deber ser de como mínimo un año.

¿Qué podemos rifar?

Se pueden rifar bienes muebles e inmuebles, semoviente (ganado) o derechos ligados a los mismos pero nunca pueden ser compensaciones dinerarias. En caso de que el premio sea un inmueble se deben de cumplimentar una serie de datos y documentos para que la Dirección General de Ordenación del Juego (dgoj) lo autorice. 

El caso de la Familia Bolumar

Si quieres convertirte en el propietario de una vivienda por el módico precio de 10 euros, debes participar en la rifa de la Familia Bolumar. Esta es la solución que ha encontrado su propietaria, debido a la crisis económica del país y la poca salida que le ha encontrado a su casa en todo este tiempo. Ha decidido organizar un sorteo, con la aprobación del Ministerio de Hacienda, donde cualquier persona puede participar y optar al premio.

Bolumar destaca que la vivienda no tiene gravámenes y está libre de cargas. Los gastos generados por el proceso de compraventa normal de una vivienda corren a cargo de la propietaria. Se puede participar adquiriendo una papeleta, o a través de la pagina web habilitada. Una vez realizado el pago, obtendrás un numero de serie por el que podrás optar al premio. 

Tal y como se recoge en las bases del concurso, el plazo de caducidad del premio será de un año a partir del momento de la publicación del resultado. Se formalizará un contrato de transferencia del bien inmueble por el cual se adjudicará la vivienda al nuevo propietario junto al cambio de nombre correspondiente y la redacción de nuevas escrituras. 

Más información:

Información sobre rifas ocasionales

Participar en la rifa de la vivienda de Bolumar