El Ayuntamiento de Cornellà ya se a puesto a trabajar para imponer sanciones a las entidades que mantengan sus pisos vacíos por un periodo superior a dos años y que dispongan de la primer licencia de uso que garantiza su uso como vivienda. Las sanciones podrían ir hasta 1.000 euros que se nieguen a facilitar el acceso social a familias sin recursos. 

Según el Ayuntamiento en Cornellà hay 177 pisos desocupados de los cuáles 18 son los que se encuentran en situación legal para sancionar a sus respectivos propietarios. Por lo tanto, se iniciará el proceso para declarar los pisos vacíos y poder gestionarlos en régimen de alquiler como vivienda social. De esta manera, el Ayuntamiento quiere evitar la situación desmesurada de ocupaciones ilegales de viviendas que por desgracia está en auge.